E r a D o r a d a - Vuestra única premisa atinada, queridos, es no creeros nada. Observad todo lo que os llega por vuestro camino con distancia, preguntándoos a vosotros mismos si la sentís verdadera para vosotros en vuestro propio corazón. No dejéis el control de vuestro ser en manos de mentes temerosas. Metatrón Vuestra única premisa atinada, queridos, es no creeros nada. Observad todo lo que os llega por vuestro camino con distancia, preguntándoos a vosotros mismos si la sentís verdadera para vosotros en vuestro propio corazón. No dejéis el control de vuestro ser en manos de mentes temerosas. Metatrón